EL BONITO JUEGO DEL DESPISTE
No me ha tocado la lotería. Como cada año prometo que no voy a comprar ni un décimo y como cada año me paso un buen rato comprobando numeritos en el ordenador que me escupe, sin ningún tipo de compasión, la frasecita "lo sentimos no le ha tocado nada". Entonces va y pones a Dios por testigo que no comprarás nada para la de "El Niño". Y no lo haré (lo digo con la boca pequeña que me conozco). Hay veces que pienso que todo lo que vemos en los telediarios es un montaje. Que cuando salen ganadores con sus botellas de champán dando saltos en las administraciones de lotería, son actores y actrices a los que pagan 30 euros y un bocadillo de mortadela. Vamos, como el montaje del primer hombre sobre la luna en el año 69. Que si, que si, que a mi me da que, como dice la leyenda, fue la mejor producción de Hollywood... pero bueno... son cosas mías que me creo porque me gusta llevar un poquito la contraria... pero sólo un poco, que conste. Pero a lo que voy, que no creo